Esos que se hacen llamar políticos
Nos tratan
como marionetas. Montan todo un teatro para hacernos creer que trabajan para
nosotros pero la verdad es que nos tratan como si fuéramos marionetas, creen que
nos pueden tomar el pelo, pero de lo que no se quieren dar cuenta es que ese
teatro al final se desmorona y la obra resulta un fraude absoluto.
He
estado siguiendo los debates de los candidatos a la presidencia de Estado
Unidos, y de los candidatos a vicepresidentes, y es para pegarles un tiro a
todos. ¡Qué desvergüenza! Con el debate que hubo entre Biden y Ryan no me voy a
meter porque solo de ver al tal Biden me dan ganas de vomitar, vaya payaso y de
los malos además.
Pero
con los de Obama-Romney sí, y además lo bueno es que lo que digo se puede aplicar a
cualquier país porque todos son iguales y así nos podemos ahorrar tinta, lo único que varía es el nombre,
Charlatanes de pacotilla, que por cierto, uno de los requisitos para ser presidente
debería ser ‘saber hablar en público’. A lo que iba, se creen que no nos damos
cuenta pero en este último no contestaron a las preguntas que les hicieron,
le dieron la vuelta a la tortilla (pregunta), siguieron criticándose el uno al
otro, y metieron otro poquillo de los discursos de sus campañas entre medias. ¡¿Pero
se creen que somos idiotas?!
Ah, y
otra de las cosas, la imagen que los asesores de cada partido les dan a estos candidatos,
vaya equipos de asesores, aunque por lo
que veo sólo hay un equipo. Primer debate, Romney: corbata roja, Obama: corbata
azul. Segundo debate, Romney: azul, Obama: roja, esperaremos a ver los colores del tercero. Y el de los
otros lo mismo, Biden: azul, Ryan: roja… esto es un cachondeo…
En fin…
no quiero seguir porque me enferma sólo de verlos y oírlos. Llámense como se
llamen, sean del partido que sean, todos son igual de embusteros.